Era el
año 1999, estábamos cursando 4° medio, y empezaban a pasar varias cosas, ya que
era el último año y había que preocuparse de la práctica profesional, la
graduación y el viaje de estudios; así que nos dispusimos a preparar el viaje,
lo primero era juntar el dinero para poder realizarlo por tanto decidimos comenzar a trabajar, pero antes había que
elegir a la directiva del curso, y ahí comenzó el primer gran obstáculo a
nuestra tan ansiada meta, ya que obviamente en un curso de 45 alumnas, no todas
se llevaban bien, es mas todo lo contrario, y quizá esto explica que habían dos
grupos dominantes y muy bien definidos, y comenzó la elección de la presidenta
de curso, habían 5 candidatas, y hubo un empate entre dos candidatas, así que
se decidió ir a un balotaje y la sorpresa fue que las dos obtuvieron la misma
cantidad de votos, cada una representaba a su grupo, y se decidió unánimemente
junto con nuestro profesor jefe tener dos presidentas de curso, 1 tesorera, 1
secretaria y una delegada.
Este
fue el comienzo de un sinfín de enfrentamientos que se sucedieron de una forma
muy particular.
Después de hecha la elección
junto con nuestro profesor Francisco, decidimos hacer fiestas comerciales para poder
recaudar fondos, la misión buscar un lugar apropiado para poder realizar la
primera de estas fiestas, los días siguientes nos dedicamos a recorrer pubs
discoteque bares y estudiar el tema de los precios para poder arrendar uno de
estos lugares y ver el más apropiado a nuestro presupuesto que dicho sea de
paso no era muy abultado quizá un poco escuálido mejor dicho.
En la
calle 18 encontramos un local llamado “Royal Club” donde principalmente iban
chicos jóvenes de carrete y se acercaba a nuestro presupuesto, así que por
supuesto los arrendamos. La fiesta fue programada para la quincena de abril,
porque se suponía que era una fecha que la gente tenía plata. Así que todas nos
preparamos de la mejor forma.
El
comentario obligado del curso era “la fiesta”, hicimos volantes de propaganda y
los pegamos en varios quioscos invitando a todo el mundo al carrete. Pues bien, llego el día señalado y me fui con
mis dos mejores amigas a la fiesta, la Marcia y la Patty, cuando llegamos
estaba allá nuestro profesor y su esposa, había un par de compañeras y un grupo
pequeño de gente, no nos preocupamos de nada ya que era temprano y la noche
recién comenzaba.
Al rato
empezó a llegar la gente y se comenzó a llenar, al parecer se estaban
cumpliendo nuestras expectativas, así que nos tranquilizamos, porque al parecer
todo estaba saliendo a las mil maravillas, e iba a ser un éxito total.
Terminamos
la fiesta a eso de las 5 de la madrugada del sábado, y las cuentas finales del
evento las íbamos a entregar el lunes siguiente, en clases frente a todas.
Pues
bien, las encargadas de la administración y producción de la fiesta éramos
nosotras, y nuestro grupo mostro gran capacidad de trabajo en equipo,
coordinación, tuvimos un muy buen resultado, las ganancias fueron sobre un 50%
lo invertido, por este motivo estábamos todas muy contentas. El dinero se
depositó en una cuenta en el banco que abrimos el año pasado como curso.
Y así se
dispuso a realizar otra fiesta; pero esta otra fiesta iba a ser organizada por
el otro grupo, nuestras rivales y ellas tenían que hacer todo desde pedir el
permiso en la intendencia para poder hacer el evento.
Encontraron
una discoteque en un barrio dedicado al carrete, cerca del metro.
La fecha
de la fiesta iba a ser la primera semana de junio, y comenzaron a preparar a
fiesta.
Cuando se
acercaba la fecha señalada todas coincidimos que ojala que ese día no lloviera
ni nada por el estilo porque sino las cosas no iban a resultar bien. Menos mal que para esos días
no habían pronosticado lluvia…
Cuando
llego el día de la fiesta el ambiente estaba un poco raro, los dos grupos
estaban compitiendo para ver cuál de los dos era más capaz de hacer mejor las
cosas.
Al llegar
la noche, comenzó la fiesta empezó a llegar la gente ala disco, el ambiente no estaba muy bueno,
no había lluvia pero la atmosfera estaba enrarecida, estaba cubierta por una
densa capa de desconfianza de las unas sobre las otras.
Al lunes
siguiente a la hora que ellas entregaban su informe al curso se dijo lo
siguiente:
·
Se cancelaron cervezas con billetes falsos,
·
Habían más de 5 mil pesos en billetes de mil
falsos
·
De la caja faltaron cerca de $45.000.
Supuestamente alguien se había
robado el dinero, o sea en resumidas cuentas todo fue un de desastre y por otro
lado fue bastante gente, hubo mucho consumo y por otro lado, los errores
cometidos por las “organizadoras” de este evento fue tan mal y tan ineficiente que perdimos plata en vez
que deberíamos haber ganado y con suerte se alcanzó apagar el arriendo de la
disco y los demás gastos. ¡Solo $10.000 pesos de ganancia! La nada misma para
tanto trabajo.
Esta
situación solo sirvió para aumentar las divisiones en el curso y
extrapolar más el conflicto y hacerlo
más intenso; si antes estábamos peleadas este desastre lo hacía irreconciliable
y con este acontecimiento se comenzaba a poner en duda nuestro gran desafío,
llegar todas juntas a final de año e irnos de gira de estudios.
Nuestro
profesor apaciguo un poco los ánimos y quedamos en que haríamos otro tipo de
eventos para recaudar fondos, por lo pronto,
las que habían perdido dinero de la fiesta lo tendrían que reponer, así que
quedaron en vender dulces y cosas por el estilo hasta juntar la plata.
Al profe
se le ocurrió que podríamos hacer una completada en la casa de alguien y ahí
vender cosas para juntar más plata y
decidimos también hacer rifas una vez a la semana y de ahí comenzar de nuevo a
entusiasmarnos para poder ir a la gira a fin de año.
A la semana siguiente, ,mas
especifico el sábado, nos juntamos en la
casa de la María Elena, e hicimos una completada, fueron como 24 niñas algunas
con pololo, y mis amigas no fueron ala completada, pero fueron varias con la
que si tenía onda, por lo menos. La cosa estuvo
bastante entretenida, hubo buena música, a una de las cabras se le paso
la mano con la chela, otra media
mosquita muerta anda con su pololo que era el tremendo mino, y una se
pregunta ¿cómo una tipa así consigue un
bomboncito tan rico? Pero bueno la
suerte de la fea la bonita la desea.
Y así transcurrió el resto del
año, con rifas, completadas, bingos, venta de dulces, de queques y cuanta cosa
salada o dulces pudiera existir. Bueno también hubieron muchas peleas
discusiones y malos entendidos.
¡Pero a pesar de que éramos
peleadoras, a la hora de hacer desorden éramos todo un solo grupo!
También como todas éramos mujeres
coquetas armábamos todo un salón de belleza en la sala de clases, unos en
depilación, otras en manicure, facial, alisada de pelo y así se sucedían nuestros
días en el liceo, a media tarde sagrado escuchar música con los audífonos escuchando
al chacotero sentimental.
Pero hubo una pelea de nuevo entre los dos grupos,
fue una discusión que comenzó por terminar con la paciencia de todas, decidimos
que si íbamos de gira de estudios cada grupo iría por su lado y nos dividiríamos
la plata primero la cuota que cada una había cancelado y segundo se dividía según
el apoyo y la participación de cada una al evento realizado y la presencia en
estos, y así cada una se fue con plata de todo el dinero recaudado durante el
año.
Y así llego el fin de año, preparándonos para la graduación,
realizar nuestra práctica profesional y pasar nuestros últimos momentos juntas.
Decidimos que el ultimo día de
clases iríamos todas y llevaríamos ropa de calle y nos escaparemos a media tarde a celebrar el ultimo día de
clases.
Pues bien le ultimo día nadie se
enoja, comenzamos a escribirnos mensajes de
despedida en las blusas, todas quedamos llenas de grafitos, mensajes y
saludos en la ropa y nos despedimos fugándonos del liceo.
Éramos como 20 y nos fuimos todas
juntas a tomar la micro, llevábamos el dinero de lo que se repartió, una de las
chiquillas llevaba una botella de ron, y así llegamos al Parque O’Higgins,
pasamos a comprar chelas, vino, vodka y un montón de cosas para picar nos
fuimos al parque a celebrar el ultimo día de clases, por fin después de 4 lagos
años, logramos llegar a 4° medio y
terminarlo, gran logro.
Y nuestra merecida gira de
estudios compartiendo nosotras esos últimos
momentos juntas, fue ahí en el Parque O’Higgins tomando vodka, cerveza, vino
comiendo papas fritas, hablando demasiadas tonteras y quedando completamente
tiradas, fue un momento entretenido, trabajar tanto para ir a la gira de
estudios que fue de lo más entretenida, toda la tarde bajo el sol tomando todas juntas en el parque
O’Higgins.